Hoy, voy a tocar un tema que me da un poco de respeto, más que nada por la cantidad de diferencia de opiniones que puede haber y lo extenso que podría ser. Quedo atrás, la mujer típica que no podía opinar, que estaba a las ordenes de su marido, metida en casa realizando el trabajo que en ella se generaba, más el cuidado del marido y de los hijos, sin posibilidad de trabajar fuera de ella, pues el marido no la dejaba o simplemente estaba mal visto, sin ningún tipo de derechos. Ahora, pueden existir este tipo de situaciones, pero bastantes menos, teniendo la mujer el apoyo de la ley y de asociaciones que se dedican a su protección, ayuda e información. Entre ellas, los Servicios Sociales del Ayuntamiento donde estéis viviendo. Muchas veces la mujer, se ha impuesto trabajar fuera del hogar para tener unos derechos, que si no, a lo mejor no los tendría de cara a la sociedad, porque, por desgracia aún la mujer que trabaja en su hogar, al cuidado de su familia y realizando las obligaciones q
Entra en un mundo real. La otra realidad.