Darnos cuenta de la realidad, o de muchas, no es fácil, puede llegar a ser un momento dado obstructivo, detonante incluso, viendo qué hay poco qué hacer, pero siempre se puede hacer algo al respecto, empezando por nosotros mismos, soltando esa alteración interna qué nos desestabiliza, y es qué ese es el fin, llevarnos a ese punto sin darnos cuenta, nunca lo hacemos hasta qué lo descubrimos y ahora es tiempo de hacerlo, vemos cada vez más claro mucho, de lo qué existe en nuestra vida, en nuestra sociedad, en el mundo, qué nos estrujan cómo esponjas, hasta por trabajar pagamos, de todo posible beneficio económico también, a no ser qué sea tan mínimo qué no se haga, pero es igual por todos lados ha no ser qué no tengas absolutamente nada, y en ese momento qué vemos una situación detrás de otra, viéndonos, balanceándonos en esa posible desestabilidad hasta qué generas dentro para soltar, y volver a pensar, estabilizarse, qué hacer en esta vida, y en la existencia esa qué nos lleva según