Cuándo el deseo de otro es bueno para el resto qué no a cometido daño grave, estamos hablando de un mundo acorde y conveniente.
Cuándo se observa lo contrario, es una pequeña parte en discordia con uno mismo y con los demás, es un mundo discontinuo.
Para reflexionar.
Poder entender lo dicho, sin juicio ni critica, sobre todo si falta toda la información de un caso.
Comentarios