Y es en ese amor qué siento, dónde me encuentro.
Lo expando, fluye, lo suelto.
Reconociendo, reconociéndome, sabiendo qué.
Todo está bien, y estará.
Todo es posible por un instante, por un momento,
por una etapa, lo podemos vivir y reconocer,
y entonces, estar, o dejar ir.
Es en ese espacio, dónde,
todo va y viene, en pasividad,
no nos movemos, pero, sí observamos,
y sentimos. Sabiendo.
Y entonces, nuestro mundo, se llena,
de nosotros mismos,
sentimos la amplitud del sentimiento,
su forma dentro de nosotros, lo analizamos,
al sentirlo plasmado en nuestro interior,
no dejarlo quieto, imprescindible, dejarlo que fluya,
lo localizamos, en la zona que lo percibimos, no,
lo bloqueamos, fluye, fluye, fluye.
Dando forma a la más extensa serenidad,
juntándose con el todo viviente, la Gran Esencia.
Ella lo transmuta y entiende, aportándonos paz,
equilibrio y un cierto o gran bienestar.
Saber vivir, viviendo.
Por Montse Cobas.
Te Amo, pero aún así te dejo ir.
Sí así ha de ser, por nuestro bien.
El Amor en Ti y en Mi.
Siempre por nuestro bien, por el bien mutuo.
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