Cuándo se observa, cada vez más claro, y así se hará.
Qué todo depende de nuestros actos y decisiones. Qué estas dirigen y van llevando hacia una dirección, en la cual no se nos dará demasiado fácil, o sí, dependiendo de ellas, qué en su transcurso iremos dándonos cuenta qué el accionar o no, nos determina, qué tarde o temprano lo haremos, pues en el impulso se ejerce paso a paso y a lo encontrado, hacia lo qué nos encaminamos, qué todo depende de nuestros deseos y de nuestra fuerza y voluntad para proseguir aún lo encontrado, qué la experiencia marca, paso a paso, con determinación. Vemos lo importante de ello, nada es porque sí, ni somos de una determinada manera sin un motivo, qué se nos puede frenar de diversas formas, sin embargo, todo depende de nosotros, el Gran Impulso qué nos determina que vamos descubriéndolo con el tiempo, con lo logrado, y hacia dónde hemos llegado, dónde estamos en el momento ahora, y hay mucho, porqué lo hay, depende de tanto.
Las dificultades, lo maltrecho, ejerce y da la experiencia, junto todos los conocimientos aprendidos y experimentados qué nos traducen a lo que hoy somos.
Así qué, siempre hacia delante, hay mucho qué ver, observar, experimentar, pero por sobre todo aprender y gestionar.
Con animo y buena ventura (armonía, alegría, esperanza, felicidad intrínseca).
Todo se dará para mejor sí así accionamos.
Cada decisión nos deriva.
Por Montse Cobas.
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