La existencia se recrea con nosotros, pasivamente, sin actuar, solo va observando hasta que punto hacemos, accionamos, cambiando para lograr nuestro propósito de vida que todos tenemos, y ahí se expande. Es en silencio minucioso, y es en ese silencio dónde ambos congeniamos, recrudecemos o vivimos simplemente, hasta ver dónde llegamos y ahí la luminosidad o la oscuridad se hace evidente, subyace. Sólo Nosotros sentiremos la evidencia, aunque pueda exteriorizarse mínima-mente. Así es toda existencia, minuciosa, silenciosa, clara si la ves, sí la puedes sentir, es, un todo subyacente. Por Montse Cobas. Buenos días.
Entra en un mundo real. La otra realidad.