Cuándo empiezas atender a las personas, sus miradas, sus palabras, su tono de voz, puedes observar su sentir, sus emociones, sus intenciones, su momento, su pasado, su vivir observando la verdad en ellos, es otra forma de contacto, de lectura, de entendimiento qué nos puede permitir ver mucho más allá en una situación, en una relación y de su propia vida, incluso de la nuestra, entendiendo la imperfección de la cuál todos estamos hechos en la búsqueda de la perfección. Delatando-nos lo imperfectos que en muchas ocasiones somos. Corazón con Corazón. Por Montse Cobas.
Entra en un mundo real. La otra realidad.