VIENTO QUE DEAMBULAS. Viento que deambulas, limpias las entrañas, sigilosamente, y sin darse cuenta, materiales anquilosados en la atmósfera, lo que supura del contaminante, errores del humano, sin cuidado sin demora, asiente y permite, y en ello resquebraja, esencias que se miden, eternas y determinadas, no dejan que las toque, es más fuerte que todo eso, sin embargo...los cuerpos...claman. Montse Cobas.
Entra en un mundo real. La otra realidad.