Hoy, en esté momento, eternos momentos e infinitos, los qué recibimos, ahora. Desde nuestro interior se siente, inmensa frecuencia activada, es inamovible. Acompañados y en sintonía, juiciosos y perdurables, ahí en la posición determinada por nosotros. Sin querer se implanta, nos relaja y soltamos, eso, qué ya hemos de soltar. Sucesos qué pasaron y pasan se desgastan, se diluyen para dar a algo nuevo e integrado en nosotros, es sano, da pie a un nuevo comienzo, ya dejando todo atrás. Lo qué ya no existe. Sin más, nos recordamos, recordando, en una frecuencia totalmente diferente qué nos hace olvidar, hacer desaparecer el desaliento, lo desafortunado, lo qué ya no se integra ni da en ello. Vivencias desde lo más profundo, no temas, aún estés pasando por un momento desestabilizador, ya sea interno o externo, tiene un cometido, el de sanar, alivianar, soltar, soltando, hiendo a dónde debamos por infortunio vivido y superado o no, todo depende de nosotros de nuestra vicisitud, de nuestr