La luna esta despierta y mientras lo hace mira, ilumina todo el enfoque qué da, dando oportunidad. A ver la verdad, la realidad qué se mantiene oculta, otra belleza, otra posibilidad. Abriendo diferentes canales qué permiten proseguir y prosperar. Cuándo despierta, no hace falta mirar, se siente con su luminosidad, y así sin darnos cuenta, unidos en el esplendor. Ratifica, marca lo qué ha de sanar. Luna llena, despierta, lo hace poco a poco para qué no nos sorprenda. Parte de nosotros. Engrandece iluminando, sacando lo qué se encontraba en la oscuridad, poco a poco, y a la vez se siente. Luna Llena, está, despierta. Por Montse Cobas T.
Entra en un mundo real. La otra realidad.