TÚ Y TU MOMENTO,
YO, EL MIO, PEQUEÑO, TORMENTO.
Ahora cuando el azúcar esta bajo,
recupero con un zumo,
y cavilo, y me percato,
que estoy comunicada más allá del Universo,
son esencias que se difuminan, halos...
que quizás tienen que ver con mi falta.
Un páncreas que ya no funciona,
sin embargo cuantas posibilidades hallo.
Encuentro mi felicidad en todos lados,
estoy ubicada en un centro,
voy...
allá donde haga falta,
y en ese camino se encuentra el que estoy formando,
me veo sola, pero... pienso, que alguien me acompañara.
Es,
una experiencia única, no latente.
Hermosa, y que no se padece,
todo lo contrario, la borde del éxtasis.
Luz que aminora todos los males,
encuentra el dolor,
encuentra la fuerza,
encuentra lo débil, y, lo difumina,
impregna de cariño, bienaventuranza,
alarde de Dios.
Hoy, en este recuerdo, de lo que es,
en este instante de lo que en un segundo creo entender,
mi tristeza instantánea, quieres y no estas, es, un segundo,
no se entiende, sin embargo,
entiendo,
todo.
Es tu momento, es tu instante,
es el mio, pequeño tormento, aunque no estés,
buscas, no sabes lo que buscas,
yo busco, y sé, lo que busco,
mi felicidad, mi bienestar absoluto, y eso, quizás,
sino se sabe como lograrlo, ni el más rico, lo consigue,
todo es momentáneo, todo es perecedero, pero la vida...
permanece.
Por Montse Cobas.
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