Y la vida es un ademán de sucesos, algunos contradictorios, no justos, los pocos, que no se entienden, no relacionados, sin embargo se dan, y de ahí, nuestra disciplina, en mantener la calma, el equilibrio, no dejar que nos saquen de las casillas, caminar, acorde a nuestros ideales y formas, responder, dentro del bien, que todo, al final, tendrá su respuesta, y lo hace en consecuencia, hay ilusiones discordantes, que no se asemejan a la realidad, hay visiones a la vista, increíbles, ilusorias, seres que al no saber realizar de otra manera, nos inmiscuyen en su proceder, y nosotros en la duda, en la incredulidad, de, ¿puede ser verdad? ellos van perdiendo camino, y nosotros el nuestro, si nos dejamos llevar, alza la vista, mira al cielo, cabila, y reflexiona, quién es el ilógico, quién no se adecua al bien. En ello hallaras la respuesta, mira hacia delante y avanza, deja atrás lo no acorde, al final, quizás te des cuenta, que no es para
Entra en un mundo real. La otra realidad.