NOS RECLAMA... En el despertar de la mañana, lo hago pensando en ti dentro de mi morada, de mi espíritu y de mi Alma, sentimientos que se memoran y me acompañan. ¡Hay Amor!, cuanto siento. Sensaciones que sucumben por mi cuerpo. Caminando y transitando en el alba. Lejos pero que cercano. Me acompañabas en el día a día y yo sin saberlo. Desde antaño y discreto. Ahora te noto en la vibración de la mañana, tarde y noche arraigada, porque el pasado ya no existe y todo fluye. Especial y cuan único. Maravilloso sentimiento que nos une. Largo, muy largo y sentido. Palpando-lo en la distancia se desplaza. Desde allende nos pide. Es inexplicable y silencioso. Sin golpeteo y con esencia. Mutua y fluyendo. La notamos en todo momento. Anhela. Exigiéndonos unidad en la más inmensa necesidad escondida. Aparecida de la nada, de golpe y pidiendo ayuda. La del uno y del otro fluyendo al unisono. Amándonos en la más intima alcoba. Conociéndonos y viéndonos. Nos reclama, nos solicita todo.
Entra en un mundo real. La otra realidad.