ELLA.
Y quizás,
el rechazo haya sido el vinculante,
rechazo por considerar que no es de tu clase,
por sus características, de mujer dañada, y sufriendo,
por considerarla imperfecta, cuándo tan solo es lo que era en el momento,
en base a Ella.
Única e intransferible,
no entendiéndola, y no aceptándola en su forma,
hermosa y Ella.
Verdaderamente no la amaste, entonces.
Por pensar que llevaba el pelo canoso, y así descuidada, enjuiciada,
cuándo tan solo llevaba el pelo blanco,
que más da, morena, rubia, blanco o pelirroja,
es su característica natural, y es sencilla, pero a la vez, quizás,
muy elegante por ser y ser sencillamente Ella.
No escuchaste sus sentimientos, sus palabras, su verdad,
y la hiciste a un lado, no la aceptaste dentro de tus círculos,
quizás la excluiste, pero.. te olvidaste,
que a través del tiempo una mujer luchadora, y qué no se ha dejado,
una vez pasado situaciones nada gratas, deformar a un ser peor, dañino y malévolo,
rencoroso, es triunfante,
consiguiendo recuperarse por si misma, a ser lo que fue, una mujer grata y elegante.
Su naturaleza, la naturaleza de toda mujer que se ame, saber lo que es,
y seguir siendo. Aún el tiempo, aún los sucesos. Siendo al final lo que en verdad es .
Y vivir en paz. En Paz en sí misma. Sin nadie más,
pero...
es qué lo buscaron, una capacidad grata.
Y única.
Por Montse Cobas.
Amor por una misma.
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