Realmente llegado a este momento te das cuenta, que no has de hacer nada esperando gratitud, sino lo que en verdad has de hacer en base a tus posibilidades, en integridad, y saber hacer en bien, hacerlo, porque siempre esto, te va abriendo compuertas, al verdadero lugar, de dónde provenimos, uniéndonos al unisono, juntos, con los que deban estar en base a sus pensamientos y acciones. Derivando-te a ese lugar.
Lugar inconscientemente o consciente-mente por todos deseado.
La gratitud, es una actitud, qué pocos están dispuestos a seguir, todo requiere un tiempo, un esfuerzo, y un mínimo desgaste, hacer el bien lo acarrea, hacer lo incorrecto, también, pero con una diferencia, la primera esparce desde uno mismo paz, serenidad, bienestar, y pureza, y en ello éxito y protección, la segunda, caos, destrucción, y desorden, sabiendo esto, y percibiendo cada momento, instante que integramos en nuestra vida con tan solo nuestra actitud, debemos decidir, si frenar, recapacitar y dar marcha atrás en formas que no nos benefician, o seguir adelante con su consecuente consecuencia.
Todo lo tiene, y proviene de nosotros mismos.
El cuerpo energético, y la reacción energética con el conjunto.
Namasté.
Por Montse Cobas.
Trabajadora de La Luz, ante todo.
Terapeuta energética, y sanadora del cuerpo energético, y con ello del cuerpo físico y mental.
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