Ciertamente vivimos en una existencia, absurda,
incomprendida, si nos ponemos a analizar,
ejercitada a un padecimiento, intruso del bienestar.
Hoy te percatas, de cuánto desconocemos,
a veces, porque no es el momento de aprender,
porque cada uno lleva un ritmo, y una determinada esencia,
que le lleva a dónde estar, sin habito de querer cambiar,
y a veces... somos tan inconscientes de lo que nos pasa,
de lo que pasa alrededor, qué es lo que nos elude del cambio,
y tener más, más satisfactorio.
La inconsciencia de la vida, arraigada, a un mundo superfluo,
en que se ha priorizado unas ganancias, que no llevan a ningún lugar,
sin embargo, en el ámbito espiritual, en el cuál te lleva a conocer, una verdad,
que pocos quieren conocer, o conocen.
Te das cuenta de qué hay algo más que es el todo.
Y nunca mejor dicho, el todo.
Un amor ganancial que empieza con lo que nos corresponde y somos,
unidos a lo esencial, lo complicado es encontrar a alguien, a un mismo nivel,
que nos de pie al entendimiento, o al menos, sino al mismo nivel,
si aportes mutuos en la diferencia, con la correspondencia en respeto, en el mismo sentimiento,
y sobre todo entendimiento, narrando una vida por igual, siguiendo en el mismo camino,
aún sea en la diferencia, qué puede ser totalmente normal, y siempre con un eterno amor, porque se ha respetado,
se ha alimentado, y se ama, ama de verdad, al unisono. Forma, y fin,
qué una gran mayoría ansiamos.
Fácil,
pero... no tan fácil, y siempre por inconsciencia, sino por uno,
por la otra parte, o partes, aunque finalmente, si sabes lo que quieres, y no te mueves,
de lo que deseas, al final, lo consigues, a lo mejor, no, como lo esperado, pero sí,
llegas a lo más profundo, que lo existencial, es capaz de donar-te, y en ello vives, aún,
sientas que no perteneces a esta existencia, pero,
si pertenecemos, sólo, que igual no es la zona que nos pertenece, porqué aquí,
ahora somos importantes, aún no se sepa, en una estación de mejora y ayuda, al que lo necesita,
aunque cómo siempre se sea inconsciente. De eso se trata...
Hoy, estamos, pero mañana, igual, no.
Es, un momento, es un transito, en el tiempo-espacio...
Inconscientes, en mucha inconsciencia.
Por Montse Cobas.
Y paradójica-mente, ahora se esta dando, mucho desmayo, mucho mareo, mucho infarto, ictus,
el choque, para despertar, lo abrupto, ver, el que quiera, y no haya acumulado tantas tensiones, miedos, que impida que esto ocurra.
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