No somos iguales, y cada uno de nosotros, llevamos nuestro propio proceso de aprendizaje y de evolución, por eso, nunca nos debemos comparar, todo es infinitamente diferente, todo puede serlo.
La infinidad.
En un mundo de todo, infinitamente amplio, empezando desde nuestra más pequeña esencia, formando infinidad de células, y en cada una de ellas, infinidad de esencias..
Por Montserrat Cobas.
Comentarios