Al final lo que nos llena, y irradia bueno, impregna , es lo que son las personas, en bondad, en bien, en amor. En, inocencia.
Volviendo, sin querer, a lo que vengo diciendo durante años aquí en mi blog.
Vibrar alto en benevolencia. En amor, y por lo tanto paz.
Es, muy gratificante, percibirlo. Y, honorable.
Por muchos años sean, riqueza, en el mundo.
Namasté.
Por Montserrat Cobas.
Comentarios