Y en un camino donde todos somos iguales, con diferencias,
exhautivas, y no tan exhaustivas.
Dónde no sabemos lo que quiere el prójimo,
y a veces, ni nosotros mismos,
dónde caminamos hacia delante, pues no queda otra,
y así aminoramos, y decidimos,
dejando atrás un destino, o yendo hacia él,
no sabemos, cuándo,
pero sí lo tenemos.
Decisiones, tras decisiones, cuántas.
Llegado a este extremo, se ha aprendido mucho,
y lo seguimos haciendo, sóla, o acompañada,
a sabiendas, de que no estamos totalmente solos,
y así vemos, lo que hay que ver,
aún sea fácil, o no tan fácil,
nos lo compliquen o nos lo compliquemos,
nadie, viaja solo.
Por Montserrat Cobas.
Pensando en Tí, un rato, o momento intrínseco, muy intrínseco, muy esencial.. a descifrar, cómo, yo lo tengo, qué hay, pues no lo ponen fácil, cuándo lo es, los tiempos pasados, pasaron, y el tiempo, sirve, para algo, para mucho, a sabiendas, de saber, que no pasa solo.
Por Montserrat Cobas. Un ayer, olvidado, y a olvidar, pasando el tiempo, dejándolo pasar.
Todo queda atrás.
Pero, siempre, algo queda.
No ha sido nada fácil, nada, pero llegado a este punto, se va haciendo cada vez más fácil, olvidar.
Y es qué todo es experiencia, y práctica, saber, y querer.
Saber lo que quieres, y lo qué no, quieres.
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