El autocontrol, es sumamente importante y necesario, pero a veces, el dejarnos llevar por las emociones, es más que oportuno, sin embargo, hay que saber hasta qué punto se puede con referencia al que las origina, sí están a la par o no, es ahí, el desconocimiento, el no conocer, el que nos hace subordinar-nos a mantener el control, hasta que sepamos, y el diálogo, el entendimiento, es totalmente indispensable, para ello, si no lo hay, sino sabemos, nada hay, o poco.
Las emociones, exteriorizan lo que la persona tiene, o siente dentro de sí, y es una forma de conocer, pero, ¿hasta qué punto hemos de dar a conocer, sin confianza?
Un punto de reflexión.
Por Montserrat Cobas.
Un punto ¡intrínseco!!
Las personas tienen miedo, o se privan, de dar e incluso sentir, emociones tales, como es el cariño, el amor, ante la posible reacción del otro. Y también ante una posible reacción, un tanto violenta.
Miedo al rechazo, a invadir su espacio, suele ocurrir, ante el inicio de una relación, e incluso, en el transcurso de ella, sin embargo, se hace necesario, cuando hay complicidad, confianza, conocemos al otro, exteriorizar nuestros sentimientos, es parte básica del ser humano, y de necesidad, saber lo que tenemos, sentirnos queridos, amados, y respetados, es indispensable en todo vinculo, manteniendo las afines. Y descartando las que nos hace sentir mal reiteradamente, aunque nos duela. Tan necesario es una elección como la otra.
En ello va nuestro bienestar, y nuestra calidad de vida.
Saber seleccionar por nuestro bien y por el otro.
Extrañar al otro, hasta tal punto, que lo tienes siempre contigo.
Es, el amor, indiscreto que se afianza dentro de uno, sentir, que es.
Son, sentimientos. Y, añoranza.
Comentarios