Todos pasamos por circunstancias, momentos, tiempos, etapas diferentes en las cuales nos comprometemos a tener qué tomar una decisión, y accionar la. Ello nos compromete a un cambio, diversos o muchos. Lo qué está claro qué cuando queremos conseguir algo, salir de una situación desagradable, qué nos perjudica, etc, etc y no lo conseguimos con lo qué hayamos intentado, nos queda seguir ahí, conformándose, o buscar diferentes alternativas, ello siempre reporta pensar el qué, el cómo, y focalizar esfuerzos a la toma de decisiones y acciones. Es un remover por dentro, removiendo fuera saliendo disparados hacia nuestro objetivo, no sin antes pensarlo bien, ver las posibles consecuencias, sí estamos dispuestos a afrontarlas, los posibles logros y beneficios, pero también ver qué pudiera pasar sino sale según nos gustaría. Es armarse de valor, fuerza, y decisión, tomemos las qué tomemos. Un compromiso con nosotros mismos. Es el foco al cambio. O cambiamos, o nos desnaturalizamos. La