Estrella Luz Dorada. 31. 💛

TE MIRO. TE ENCUENTRO. TUS OJOS CON LOS MÍOS. MIRADAS QUE HABLAN DESDE EL CORAZÓN. ¡QUE PENA! QUIZÁS HOY, NO PUEDAS LEERLAS NI SENTIRLAS DESDE TU INTERIOR. PALABRAS SILENCIOSAS DENTRO DE LA ESENCIA. COMUNICACIÓN QUE ES INDOLORA PERO SÍ SENSITIVA. HUBO UN TIEMPO, QUE PARA MÍ, EN PEQUEÑOS MOMENTOS, ERA MI FORMA DE INTERPRETACIÓN. MOMENTOS LLENOS DE SENSACIÓN. PERCEPCIÓN DE UNIDAD ÚNICA. EN MI MENTE ENCUENTRO SU MIRADA, SU ROSTRO FRENTE AL MÍO. EN MI CUERPO IMPREGNADA LA ENERGÍA QUE SE MOVÍA. RECUERDO EMOTIVO Y UN INSTANTE LLENO DE TRISTEZA. FUE PERO NO FUE. SITUACIONES SIN COMPRENDER. GENTÍO QUE NO SUPO NI ENTENDIÓ, NADA MÁS LO QUE QUISO VER. TRISTEZA POR SU IGNORANCIA Y SU MAL PROCEDER. NO HAY RESISTENCIA EN ELLO. SÉ QUE TODO SIGUE MOVIÉNDOSE, HASTA LLEGAR AL LUGAR QUE DEBA LLEGAR. PAZ QUE SIENTO Y TRANQUILIDAD OBSERVANDO LA SITUACIÓN VIVIDA. PASÓ YA EL MALESTAR. MALESTAR DE LO SUCEDIDO POR TRES PARTES. PIENSO ÍNFIMAMENTE, EN EL RECUERDO YA NO HAY INCOMODIDAD, SOLO UNA LIGERA TRISTEZA

4 De diciembre. Fecha hermosa y grande. Preguntareis... el motivo de su importancia. Un día como hoy, a punto de nevar, muy frió, y con las calles cambiadas a las de hoy. Con apenas coches. Se movía la gente con cortesía. Nací yo, maricmasi o Montse. Un ser pequeñito. Indefenso, primogénita. Comenzando con mi lucha silenciosa. Ya en el canal del parto. Hoy miro hacia atrás. Observo una larga vida. Perteneciente de una historia. Como tú de la tuya. Me gusta esta fecha. Estoy viva. Puedo ver y conocer. Puedo andar y transitar. Puedo realizar multitud de cosas. Por ello doy gracias cada día. Me han dado una oportunidad y la estoy aprovechando. Soy lo que soy. Un ser hermoso como todos. Con el privilegio de poder dar y recibir amor. Un sentimiento como ninguno. Ofreciéndome la ocasión de integrarme con el Todo. Incluido vosotros. Me ofrecéis algo insuperable. Me alegra los sentidos. Me satisface. Me inunda. Algo inimaginable en mi niñez, pero que ya existía. Creciendo en mí de una forma ar

CUENTA LA LEYENDA... Entre los pocos supervivientes que huyeron despavoridos al finalizar la guerra de Troya se encontraba el príncipe Bianor, el cual, tratando de evitar la masacre, se dirigió al puerto buscando alguna nave con la que abandonar el país. Al no encontrarlas, se abrió camino hacia Grecia y después a Albania, donde fundó un reino. A su muerte, su hijo Tiberis, le sucedió en el trono. Tiberis tenía dos hijos, Tiberis y Bianor. El primero, legítimo de su matrimonio y el segundo engendrado con una bella aldeana llamada Mantua. Tratando de evitar los problemas de sucesión en el reino, Tiberis dotó de una fabulosa riqueza a la aldeana Mantua y a su hijo Bianor, expulsándolos del reino rumbo a Italia. Una vez en Italia, y en la región del norte, esta aldeana fundaría la ciudad de Manto, hoy conocida por Mántova. Cuando Bianor alcanzó la madurez, se vio influenciado por un sueño, donde el dios Apolo le aconsejaba rehusar al reino que le ofrecía su madre, tomando la decisión de