Estefani, era una muchacha de 15 años, feliz y muy hermosa, estudiaba, salia con sus padres y con sus amig@ de vez en cuando.
Tenía una costumbre, en sus ratos de relax, hacía pajaritos de papel.
Vivían en el campo, donde había un desfiladero que la dejaba ver toda la belleza de la naturaleza que tenía, tanto enfrente, como a su alrededor.
Cerca de la orilla de esté, había un gran árbol que llevaba, según su madre, muchos años allí plantado. En el se posaban muchos pájaros y aves, sus cantos, a la vez que el sonido de las ramas del árbol junto con los sonidos del entorno, hacían del ambiente un lugar muy armonioso, especial, lleno de paz, que a Estefani le ayudaba a serenarse y a concentrarse en sus pensamientos, en sus sueños.
Se sentaba en una de las grandes raíces que salían de la tierra. Allí cerraba los ojos y se dejaba llevar por su imaginación, pensaba en todo lo que le gustaría hacer, y como sería su vida, luego los abría, y cogía una libreta que siempre llevaba consigo, rasgaba una pagina, y mientras pensaba en lo que quería hacer, iba formando un pajarito de papel. Una vez lo había terminado, por cada idea, un pajarito que lanzaba cayendo despacio por el acantilado.
Lo veía alejarse por el estrecho de esté, hasta que desaparecía de su vista, luego se volvía a sentar en el árbol y mentalmente le decía, habiéndose convertido en su compañero de sueños, lo haré.
En cada afirmación obtenía una respuesta, las hojas se movían con un sonido especial al chocar con el viento o brisa o simplemente recreaba su olfato con el olor de sus hojas que en ese momento desprendían. Habían formado una conexión tan especial entre ellos, que era raro el día que no iba al acantilado a sentarse y meditar junto y con el árbol.
Estefani, en ese momento, sentada en el palco de la universidad, abrio los ojos recordando, su adolescencia. Esperaba con paciencia las notas de fin de carrera.
Al fin escucho su nombre, y lo que esperaba así fue, se había esforzado y por consiguiente esperaba aprobar, dijeron todas las asignaturas y la nota global de...
Sobresaliente,
Su corazón latía con fuerza, su esfuerzo había merecido la pena, recibía felicitaciones de sus compañeros de curso, abrazos, era feliz, estaba muy contenta, termino la carrera. Otra nueva etapa empezaba...
Al final de la recepción de notas, anunciaron que la entrega del reconocimiento de fin de carrera se haría para el siguiente sábado.
Se realizaria en el jardin de la universidad con la asistencia de todos los familiares que quisieran asistir.
Llego el día, todos estaban sentados esperando que el director dijera su nombre para salir al estrado a recoger las notas y con ello dar por terminado la carrera de medicina que tanto había ansiado, en especial Estefani, ya que lo tenía en mente desde muy niña.
Hacia un hermoso día con algo de viento que aminoraba la calor que estaba haciendo, siendo una ventaja, ya que el sol calentaba de lo lindo.
Tras estar atenta a sus compañeros que salieron delante de ella, llego el momento en el que escucho su nombre,
Estefani Romero.
Estefani, salio algo nerviosa, hasta tal punto que tropezó con una de las sillas.
Cuando llego al palco se le engancho el vestido que llevaba en él. Tuvieron que ayudarla a soltarse. Creando un ambiente de risas que rebajo el nerviosismo y la ansiedad de la muchacha.
Una vez delante de sus compañeros, y al lado del director de la universidad, recogió el diploma donde estaban anotadas las notas de todo el curso y en el cual se verificaba el final de carrera.
Acercándose al director, le dio un beso y las gracias.
Después de la subida que tuvo al palco, lo bajo con cuidado. Recibiendo un golpe de viento que le aparto el cabello de la cara suavemente.
Tenía una costumbre, en sus ratos de relax, hacía pajaritos de papel.
Vivían en el campo, donde había un desfiladero que la dejaba ver toda la belleza de la naturaleza que tenía, tanto enfrente, como a su alrededor.
Cerca de la orilla de esté, había un gran árbol que llevaba, según su madre, muchos años allí plantado. En el se posaban muchos pájaros y aves, sus cantos, a la vez que el sonido de las ramas del árbol junto con los sonidos del entorno, hacían del ambiente un lugar muy armonioso, especial, lleno de paz, que a Estefani le ayudaba a serenarse y a concentrarse en sus pensamientos, en sus sueños.
Se sentaba en una de las grandes raíces que salían de la tierra. Allí cerraba los ojos y se dejaba llevar por su imaginación, pensaba en todo lo que le gustaría hacer, y como sería su vida, luego los abría, y cogía una libreta que siempre llevaba consigo, rasgaba una pagina, y mientras pensaba en lo que quería hacer, iba formando un pajarito de papel. Una vez lo había terminado, por cada idea, un pajarito que lanzaba cayendo despacio por el acantilado.
Lo veía alejarse por el estrecho de esté, hasta que desaparecía de su vista, luego se volvía a sentar en el árbol y mentalmente le decía, habiéndose convertido en su compañero de sueños, lo haré.
En cada afirmación obtenía una respuesta, las hojas se movían con un sonido especial al chocar con el viento o brisa o simplemente recreaba su olfato con el olor de sus hojas que en ese momento desprendían. Habían formado una conexión tan especial entre ellos, que era raro el día que no iba al acantilado a sentarse y meditar junto y con el árbol.
Estefani, en ese momento, sentada en el palco de la universidad, abrio los ojos recordando, su adolescencia. Esperaba con paciencia las notas de fin de carrera.
Al fin escucho su nombre, y lo que esperaba así fue, se había esforzado y por consiguiente esperaba aprobar, dijeron todas las asignaturas y la nota global de...
Sobresaliente,
Su corazón latía con fuerza, su esfuerzo había merecido la pena, recibía felicitaciones de sus compañeros de curso, abrazos, era feliz, estaba muy contenta, termino la carrera. Otra nueva etapa empezaba...
Al final de la recepción de notas, anunciaron que la entrega del reconocimiento de fin de carrera se haría para el siguiente sábado.
Se realizaria en el jardin de la universidad con la asistencia de todos los familiares que quisieran asistir.
Llego el día, todos estaban sentados esperando que el director dijera su nombre para salir al estrado a recoger las notas y con ello dar por terminado la carrera de medicina que tanto había ansiado, en especial Estefani, ya que lo tenía en mente desde muy niña.
Hacia un hermoso día con algo de viento que aminoraba la calor que estaba haciendo, siendo una ventaja, ya que el sol calentaba de lo lindo.
Tras estar atenta a sus compañeros que salieron delante de ella, llego el momento en el que escucho su nombre,
Estefani Romero.
Estefani, salio algo nerviosa, hasta tal punto que tropezó con una de las sillas.
Cuando llego al palco se le engancho el vestido que llevaba en él. Tuvieron que ayudarla a soltarse. Creando un ambiente de risas que rebajo el nerviosismo y la ansiedad de la muchacha.
Una vez delante de sus compañeros, y al lado del director de la universidad, recogió el diploma donde estaban anotadas las notas de todo el curso y en el cual se verificaba el final de carrera.
Acercándose al director, le dio un beso y las gracias.
Después de la subida que tuvo al palco, lo bajo con cuidado. Recibiendo un golpe de viento que le aparto el cabello de la cara suavemente.
Hacia su mano con el movimiento de esté se le acerco un pajarito de papel. Como en otras veces habia sucedido.
En cada logro de lo pensado delante del árbol y de cada pajarito de papel lanzado. Aparecía un nuevo pajarito de papel a la vez que alguna forma o esencia de la naturaleza acompañaba a esté.
Estefani, agradecida, vislumbraba una sonrisa de esperanza, agradecimiento y felicidad.
Sintiéndose totalmente acompañada en cada momento y decisión que determinaba en su vida.
maricmasi.
Copia sin corregir, sin mejorar del libro "Cuentos con mensaje". Derechos reservados. Autora Montse Cobas de la editorial Cultivalibros. Podéis acceder a su compra en el lado derecho del blog. Muchas gracias.
LUNA SERENA
Copia sin corregir, sin mejorar del libro "Cuentos con mensaje". Derechos reservados. Autora Montse Cobas de la editorial Cultivalibros. Podéis acceder a su compra en el lado derecho del blog. Muchas gracias.
LUNA SERENA
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