Sentirse aludidos.
Cuándo una persona se siente aludida es una llamada a la reflexión.
No siempre va con uno lo qué se escucha, se lee, o se dice, y sí va, y se siente aludido, es preciso, algo se ha realizado o se ha comunicado relacionado con ello, positivo o no. Ahí no hay pérdida, un comportamiento qué ha podido derivar a un cierto resultado concreto qué es el que se ve, menciona, sea sobre su persona o no.
Sentirse aludido es un golpe de atención, qué es lo qué se hace o se ha realizado qué hace sentirse de esa forma, las sensaciones y las respuestas se impregnan en nosotros con la intención de recordarnos lo qué hemos realizado tiempo atrás.
Otra cosa es la intencionalidad de quien comunica o hace algo para quienes han realizado lo qué se menciona.
Luego está la otra contraparte, la verdad, la intención, la manipulación, con un fin específico por alguien hacia otro o otros. Un arma de doble filo, pues verdaderamente nunca se sabe, pues las personas no se conocen al cien por cien, haciendo caer a quienes se afianzan confiando en otro con un fin común sin conocerlo verdaderamente, a caer en una trampa, pudiendo ser cómplices de una trama, a veces malévola, ilícita, y contraproducente para una mayoría, qué tarde o temprano se verá.
Conocer, siempre es un seguro de vida y de existencia, qué puede prevenir nos de infinitas formas, sí, cierto, se conoce poco, y se desconoce mucho, incluso a las personas, y ante está falta de conocimiento sólo nos queda la experiencia qué nos marcara en positivo o negativo mientras duré, luego sólo queda la asimilación y cómo respondamos a ello, siendo más veraces y más sabios, aprendiendo la lección, qué son muchas.
Sí a veces se duerme con el enemigo, imaginaros sí es una persona qué se sabe de el o ella poco.
Hay personas qué tienen una apariencia y cuando se les va conociendo tienen un fondo inimaginable. Y éstas son las qué nos pueden sorprender tanto en positivo cómo en negativo.
Es difícil conocer en esté sentido, pero hay señales qué delatan, miradas, palabras, formas de hablar, lo qué comunica, actos y no actos, veracidad en cuanto a lo qué hace y luego hace delante de uno.
El conocer y la observación es de suma utilidad para con nosotros mismos. Pudiendo deducir más fiable mente, además de seguir nuestra intuición y sexto sentido qué muchas veces nos avisa y al cual no se suele prestar atención.
Sentirse aludido, señala desde dentro. Para corregir, defenderse y ser auto conocedor de uno mismo.
Sino se ha realizado nada incorrecto sentirse así no da pie a temer, es afianzarse a lo dicho o hecho con completa seguridad de qué se hizo correctamente en unos principios de educación, buen trato y respeto hacia los demás en concordancia a lo habido.
Esta situación llama la atención cuándo se habla o comenta sobre algo en general viendo la posible reacción de quién escucha no teniendo nada qué ver con esta. 🤔 . Y ya no porque esté a favor o no de lo qué se diga sino porque se sienta aludido. Entonces no es algo qué vaya con el qué dice va con el qué interpreta, comprende o entiende, mal o bien, movilizándose en este diversas reacciones qué dejan entrever, tanto para uno cómo para el otro.
Es. Auto suficiencia.
Buenas tardes. 💜
Comentarios