Viviendo y sin vivir, sin miedos y en la rutina, son tiempos de entendimiento, y confusión, de dejar ver, y de salir, de darnos cuenta de la realidad, de saber y poder centrarnos, para mantener la calma, obligación si queremos subsistir, de tomar verdaderas decisiones y buenas, de saber estar y de encontrarnos, de amarnos, sobre todo amarnos, de vernos en los ojos del otro, de saber de nuestras situaciones, sintiendo la del prójimo, para así, hallar paz. Y sobre todo, discernimiento, darnos cuenta de la verdad, muchos diréis y para qué, para saber dónde estamos, lo que queremos, y dónde queremos estar. Para saber quienes somos, y de nuestras necesidades, iremos juntos, en busca de la realidad. Por Montse Cobas.