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Dibujo canalizado. Sanador.

Título . Observación interna transmutadora. Realizado ahora, canalización sanadora, mediante el dibujo. Por Montse Cobas.  

Vivir.

  🌷🌹🌸 La necesidad de vivir, se arraiga en nosotros, en nuestro deseo de hacerlo. Pase lo qué pase. Y lo haces cuándo ves la verdadera Existencia... Lo qué somos y lo qué es a nivel intrínseco, esencial... Más allá. De la vida qué todo es viviendo y observándolo. Un Todo, pero más que nada en la Luz y desde Ella. Unificándose. Y por ello pureza. Por Montse Cobas.

Nosotros. En el hoy.

  Cuándo estrechamos lazos es cuándo de verdad conocemos, sí hemos hecho bien o no, y con ello habremos de vivir hasta qué obremos una solución, sí se requiriera. En ese momento, es cuándo un estallido se obra en nosotros ante la nueva realidad, incomoda en ocasiones, muchas veces inimaginable, aunque a veces la hubiéramos percibido o intuido o sabido.  Sucumbiendo un remolino de emociones en nosotros, sabiendo y sin saber qué hacer, pudiéndonos llevar por alguna de ellas qué son las qué marcan el desenlace. Un desenlace qué puede influir a muchos sin querer o queriendo, es cuándo nos damos cuenta de lo realizado en nuestra vida, de decisiones o no tomadas qué nos han llevado a ese conocimiento qué se integra en nuestra vida, teniendo qué accionar para un nuevo comienzo otra realidad diferente qué nos encontraremos, para bien o no tan bien en apariencia, es cuándo no pudimos elegir o lo hicimos mal, y ahí de vuelta nos ubicamos, con nuestro yo personal, desarraigando emociones y se

Almas perdidas.

  Las personas debemos encontrar nuestro lugar. Dónde podamos vivir en base a nuestros deseos y necesidades. Con las personas idóneas y correctas. Hay una y muchas diferencias... Y eso requiere tiempo, experiencias y conocimientos, los qué ofrece la vida. Depende de nuestros encuentros y de nuestras decisiones. Las qué deriva. A lograrlo antes o más tarde, e incluso, nunca. Almas perdidas e n la Tierra qué buscan... En estos momentos. La búsqueda  se agudiza. En plena Conciencia. Y encontraremos. Sin desaliento. Por Alma Azul.

Las horas del reloj.

  Las horas del reloj , están paradas,  ya no sé escucha su tic tac. Es el momento presente tan sólo.  Se escucha el silencio tras silencio,  la esencia nuestra qué lo requiere,  para la asimilación y correspondencia de lo dado.  Tú, sólo tú y cada uno de nosotros, escuchándonos.  El latido del corazón nos dice...qué aún, estamos vivos.  Y qué no estamos solos. Nadie. Por Montse Cobas.

Ángeles y demonios.

  Ángeles y demonios.  Luz y oscuridad.  Unos podrán vivir un suplicio y otros un verdadero infierno.  Todos vivimos y experimentamos en la vida terrenal, y al otro lugar donde vayamos después de fallecer aquí, dónde iremos también lo haremos.  La cuestión es cual es más soportable, llevadero, o insufrible.  Unos pueden hacer sufrir padecer a los demás y los otros calman, salvan, aman, sanan a pesar de todo lo qué les puedan haber infringido.  Al final al otro lugar unos hallarán la paz sublime, y otros padecerán lo qué no puedan aguantar sin embargo no les quedarán otro remedio.  La escala de sufrimiento cuál puede ser mayor, es fácil de adivinar.  Ángeles en el cielo y demonios en el infierno.  Luz y oscuridad.  Realidad, ficción, religión, espiritualidad, creíble, o, no.  Puedo ver el uno y el otro.  Me quedo con uno.  Buenas noches, y sueños depuradores, sanadores, y liberadores.  ✨🙏✨💙✨ Toda ficción qué estamos viendo en el cine está basada en una realidad, aunque sea pequeña, ex

Lidiar y Fluir.

  Lidiar... Es fluir y entender nuestras emociones, ser comprensivos, con nosotros mismos y con el resto. Todos tenemos nuestros momentos, nuestras ocasiones y decepciones, nuestro propios milagros y nuestros desconciertos. Vivimos constantemente en un mundo totalmente emocional, somos emocionales, cada palabra, cada pensamiento, cada situación vivida, nos acarrea un movimiento energético, libre. Libre ha de ser. Sino es así y nos encogemos, nos estrechamos, nos tensionamos, en algún lugar permanece, no fluye. No hay soltura, y al no haberla, se arrincona interiormente. Lidiar. Es entender, satisfacer, armonizar nuestras necesidades más únicas. Y en esa autenticidad nos reconocemos y lo hacemos con los demás. Es estrechar lazos, conociéndonos y entendiéndonos, desde lo profundo de nuestro corazón. Todos pasamos infinitamente por instantes, tiempos abruptos, qué debemos y deberemos sortear. Es, estamos juntos en esto...y te entiendo, desde la armonía, fluir y dejar ir. Lo qué ya no