La gente pretende ayuda de una persona sin ofrecer nada a cambio, y esa misma persona después de mucho tiempo haciéndolo, se cansa, pues cómo todos ha de vivir y cubrir sus gastos, e incluso permitirse algún capricho, sin recompensa alguna, tan sólo por ayudar y hacer el bien, teniendo qué buscar diversas alternativas, e incluso encontrándose con diversos inconvenientes a solventar, algunos difíciles o muy difíciles, para salir adelante.
Por lo tanto si se toma un tiempo de descanso o decide no seguir ayudando está en su derecho.
Es hacía los qué no están acostumbrados a agradecer, a tenerlo en cuenta y tan sólo por recibir la ayuda, mínimo respetar y no perjudicar a la persona qué le ha ayudado o a hecho el bien en algo qué le interesaba. Curiosamente no saben hacerlo, una gran parte, porqué no saben qué es y lo qué conlleva ayudar, aparte de tiempo dedicado e incluso sacrificio.
Está situación existe.
Sí todos tenemos mucho qué hacer y obligaciones. Pero dentro de todos, estamos cada uno de nosotros, el qué ayuda, el qué es ayudado, y el qué no se le pasa nunca por la cabeza ayudar.
Y esa es la diferencia, dar por los demás.
Teniendo a veces qué darnos. Mirando por nosotros cuándo no somos valorados ni se nos agradece simplemente respetando nos, mínimo.
Es valorarnos propiamente.
Necesario.
Es en base a situaciones qué se ven, se sienten e incluso se viven.
Buenas noches.
✨🤍✨
Y esto también lo hemos de aprender y gestionar.
Cuánto qué aprender.
Comentarios