Se defiende mucho en algunos sectores, dependiendo de cuál, el cuestionamiento de la verdad.
Qué es la verdad, eso simplemente verdad, lo qué ha sucedido o sucede ciertamente, muchas veces no sacada a la luz y por eso se aprovechan los qué van en contra de ella, ya qué ésta les puede perjudicar de alguna forma, aunque sólo sea qué les pueda desprestigiar por dar a conocer quiénes son.
Aunque el tiempo, mucho o poco, en el trato y conocimiento, va dejando ver y va poniendo a todos en su lugar. Por eso pasa lo qué pasa. Todo tiene un motivo de ser.
Volviendo al tema.
Cada uno vive una situación a través de diversas emociones o sentimientos germinados por traumas, diversas situaciones, naturaleza de la persona, programaciones, modelos y conductas de los padres qué pasan directamente a los hijos, vivencias... inducidas desde la niñez...etc. Manejado todo por lo dicho, emociones y sentimientos, por eso, cuidado, la verdad cuál, no es lo mismo una verdad desde una persona honesta, sincera, noble, a la de una persona qué se mueve a través de la envidia, el rencor, la venganza por cualquier motivo simplemente por haber dado una opinión contraria a la de él o ella, manifestando engaños con el fin de manipular un suceso o sucesos o ha alguien para su propio beneficio (el qué distorsiona) e incluso de otros, estos últimos la pueden llamar su verdad pero en realidad no tiene nada qué ver o poco con ella. Lo único cierto es lo qué les promueve a este hecho o reacción.
Esa es la sustancial e importante diferencia, uno se puede encontrar en un circulo vicioso del cuál es complejo salir por estar promovido por diversas energías negativas qué surgen por lo último anotado traduciéndose en actos sin rumbo fijo, lo cuál distorsiona la realidad y la verdad, no encontrando el equilibrio tan importante en todo, influyendo en la cuestión común, no sólo hacia quién va dirigido sino qué también en quiénes lo promueve, ya qué de ellos surge.
Es la energía en sí.
El resultado siempre es ambivalente.
Y en el segundo caso negativo para ambas partes pues se magnetiza directamente de eso mismo, y más sí hay desconocimiento de una forma o otra de ello.
La humanidad desconoce totalmente o en algunos casos parcialmente o no tanto qué somos energía y qué todo se mueve por ésta y su vibración correspondiente, llevando a efectos, y de ahí lo qué sucede.
Pero ahora, estamos en diversos campos, positivo y negativo, habiendo la posibilidad de salir de uno o del otro, dentro de la conciencia, saber gestionar y accionar de cada uno. Enfocándonos y gestionándolo desde nuestro ser interior qué nos ubica.
Hay una lucha... tremenda en estos momentos.
Namasté.
Paz y amor en nuestro corazón, realidad absoluta.
Fotos realizadas por mi, hace unos años.
Buenos días. 🌹
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