ACTOS, PALABRAS Y GESTOS. Decir adios y no buscar porqués. Caminando por la calle observando mi pasado, lo que fue y lo que aconteció, miras ya de lejos, muy lejos. La mente, los sucesos y los miedos, ¡increible pero que verdad! nos dominan encharcando nuestra propia naturaleza, creándonos malestar y muerte anunciada. Nos apagamos como una vela que se quema. Quebrados hasta la médula, no hay visión del presente, de lo que nos sucede, mellados poco a poco, duele en lo interno y no lo vemos. Sucesos, palabras y actos que no acertamos el motivo. Perforando poco a poco nuestra esencia, ciegos. Nos influye como el fuego que nos quema, nos perfora como ácidos en la piel , en silencio. Embotados sin darnos cuenta, muertos en vida, sin verlo, caminamos por no quedarnos quietos, sentidos apagados, la experiencia los anula. Nadie sabe nuestro destino, ¡hasta que llega! Descubriéndolo anonadados, asustados y sin equipo, sin d
Entra en un mundo real. La otra realidad.